La iniciativa, financiada por el Gobierno Regional y ejecutada por Corporación ASOEM, benefició a seis jóvenes del Centro de Cumplimiento IP-IRC, del Servicio de Reinserción Social Juvenil de Coquimbo.
Durante tres meses, seis adolescentes que se encuentran privados de libertad en el centro de cumplimiento IP-IRC, dependiente del Servicio de Reinserción Social Juvenil (SRJ) de Coquimbo, aprendieron las técnicas y tendencias más actuales en peluquería y barbería, con miras a su reinserción social.
La iniciativa, ejecutada por Corporación ASOEM, se llevó a cabo gracias al programa “Renaciendo Hacia Una Vida Independiente II”, financiado por el Fondo Social de Interés Regional 2023 del Gobierno Regional de Coquimbo, en beneficio de adolescentes y jóvenes que se encuentran privados de libertad o en internación parcial.
Durante la ceremonia de certificación, en la que estuvieron presentes familiares de los jóvenes, la directora del SRJ Coquimbo, Loreto Rebolledo Rissetti, valoró que “esto da cuenta de cómo los jóvenes van reconociendo sus capacidades, de cómo van adquiriendo habilidades en estos oficios que muchas veces son poco explorados, que son una forma de generar ingresos y que les van a permitir ser un aporte a la comunidad”.
En total, cinco varones y una mujer aprendieron desde los conceptos más básicos, hasta las nuevas tendencias en peluquería y barbería, recibiendo un kit de emprendimiento para que puedan comenzar a trabajar una vez que finalicen su sanción.
Kimbelen Figueroa, presidenta y fundadora de la Corporación ASOEM, destacó que “hemos realizado un trabajo intensivo con los jóvenes privados de libertad, orientándolos hacia la vida independiente, por lo que se les enseñan acciones que van en el ámbito del desarrollo personal, valores, ética profesional, hasta administración básica de economía. Durante este curso, los adolescentes presentaron una tremenda adherencia y entusiasmo, entendiendo que muchos las proyectan como una oportunidad de reinserción”, expresó.
En efecto, el curso fue bien recibido por los jóvenes. En palabras de B.A.G.M (18), “lo que más me gustó fue haber aprendido diversas técnicas, no solamente cortar el pelo, sino también manipularlo, teñir, rebajar, distintas habilidades que sirven para la vida. Al final todo esto sirve para tenerlo como un oficio y ya teniendo un certificado de aprendizaje podemos surgir en la vida y tener nuevas oportunidades. Todas las oportunidades que vengan para mí siempre van a ser bienvenidas”, manifestó al recibir su diploma.
El curso de peluquería y barbería se suma a los ya dictados por “Renaciendo hacia una vida independiente II” de ASOEM el año 2023, correspondientes a panadería-bollería y sublimación.
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