Los recientes dichos del rector interino de un emblemático colegio sobre estudiantes con Condición del Espectro Autista (CEA) revelan más que una frase desafortunada: reflejan desinformación y un preocupante sesgo ante la diversidad. Clasificar a los alumnos por un diagnóstico y asumir que no pueden aportar al logro académico es negar su individualidad y limitar su desarrollo.
La CEA implica un amplio rango de características, talentos y desafíos. Suponer que quienes la presentan no pueden contribuir al aprendizaje es desconocer el valor de la diversidad. Las barreras más difíciles no son las del aula, sino las que levantan los prejuicios.
Nuestro país no puede darse el lujo de prescindir de los múltiples talentos que lo conforman solo por el desconocimiento o los sesgos de quienes lideran sus instituciones educativas.
Alejandra Ríos Urzúa
Directora Observatorio para la Inclusión UNAB
Una verdadera fiesta del running se vivió en La Serena, donde 3.000 corredores se congregaron…
La víctima fue encontrada en la vía pública con una herida en el tórax. Carabineros…
Diversas instituciones se mantienen desplegadas en el sector de Villa Río Amargo, en la comuna…
La Brigada de Homicidios de la PDI Temuco indaga las circunstancias en que un hombre…
En el marco de la inscripción de la candidatura presidencial de Evelyn Matthei, el parlamentario…
● La candidata será respaldada por 5 colectividades, y el pacto parlamentario incluye a la…